Educador popular: Hay que saber trabajar los métodos de crianza de la comunidad con los más jóvenes

Autor: tomedes

  • Educador popular: Hay que saber trabajar los métodos de crianza de la comunidad con los más jóvenes

    Educador popular: Hay que saber trabajar los métodos de crianza de la comunidad con los más jóvenes

    Caracas, 15 de octubre de 2025.- “En la ciudad, desde las cosmovisiones de los pueblos indígenas, tenemos un modo de recuperar las prácticas de diálogo y conversación con la madre tierra”. Así lo dijo Juan Carlos Nina Bautista, educador popular boliviano, en el programa “En clave comunal”.

    Juan Carlos Nina Bautista, conocido como Archi, es especialista en Ciencias Jurídicas y promotor de líderes juveniles con un enfoque comunitario en barrios populares de la ciudad de La Paz, en Bolivia, y fue uno de los más de doscientos cincuenta invitados del extranjero que asistieron al Congreso Internacional en Defensa de la Madre Tierra realizado hace unos días en Caracas.

    Nina Bautista relató que las sabidurías ancestrales no están ausentes en los espacios urbanos, sino que habitan las ciudades, especialmente en sus periferias. En La Paz, Bolivia, la experiencia de los yapus urbanos —espacios de siembra bajo un sentido ancestral— surgió como propuesta para construir ciudades interculturales desde los saberes indígenas.

    “La ciudad de La Paz es una hoyada, donde el centro de la ciudad está más o menos al fondo de la hoyada y en las periferias existen unas quebradas donde se sube y se baja a los hogares a través de las gradas. Una de estas gradas conduce hacia El Alto, donde comienza el altiplano y, con él, la expansión de esta otra ciudad colindante. Nosotros, desde nuestra experiencia, impulsamos los yapus urbanos como una propuesta de sabiduría indígena aplicada a los espacios urbanos, orientada a la construcción de ciudades verdaderamente interculturales”, contó.

    Nina Bautista contó que la iniciativa nació tras la observación de una jardinera pública, mientras bajaba unas gradas, donde una pobladora llamada Sonia, una mujer de pollera (una indumentaria cultural andina de los Andes), cultiva papa, repollo, zanahoria y cebolla como forma de cuidado comunitario.

    La joven boliviana le dijo a Nina Bautista: “La mejor forma que yo tengo de cuidar la jardinera es sembrar”.

    Narró que fue en ese momento cuando se le ocurrió la idea de impulsar un proyecto para sembrar y cosechar papa en la ciudad. “Así nació esta iniciativa de siembra y cosecha de papa en espacios urbanos, en territorios populares, como forma de recuperar prácticas ancestrales en la ciudad”, manifestó.

    El educador popular expuso que, inicialmente, le llamaban huertos urbanos a estas jardineras; pero, después, se dieron cuenta de que eran diferentes. Señaló que en estos huertos había algo que no coincidía con el nombre, porque habían visto huertos urbanos en otros espacios.

    “Le preguntamos nuevamente en el proceso a doña Sonia: ¿Qué es lo que usted hace antes de sembrar, porque es con saberes ancestrales? Entonces queríamos saber las características de esos saberes ancestrales. Y ella nos dice: ‘Lo primero que yo hago es pedirle permiso a la madre de tierra y darle un pago a la tiramama’ ―así ella le pone el nombre a la madre de tierra―. ¿En qué consiste? Consiste en colocar un pedazo de sebo de llama con cuatro hojas de coca. Cava unos 20 centímetros ―o 15 centímetros― en el centro de la jardinera, lo coloca y lo tapa. Le echa un poco de vino y le dice que dé buena siembra, que se sirva la tierra para que ella luego nos sirva de papa. Y así es como ella hace su pequeño ritual pidiendo permiso. Y posteriormente, en un mes, empieza a sembrar”, explicó Juan Carlos Nina Bautista.

    ‘Yapus’ urbanos’

    Juan Carlos Nina “Archi” Bautista relató que el seguimiento al ciclo agrícola de doña Sonia reveló una dimensión espiritual y comunitaria que trasciende la técnica de cultivo.

    “Les cuento todo esto porque, después de que desarrollamos todo el ciclo agrícola, acompañando a doña Sonia en el seguimiento de su siembra de papa, en ese proceso, notamos que la papa, se siembra más o menos entre octubre y noviembre, y que hacia febrero comenzamos a tocar música tarqueada para cantarles a las flores de esa jardinera. Doña Sonia decía que había que cantarle. Entonces tuvimos que aprender a tocar, y preguntamos a los vecinos quiénes sabían música. Salieron los abuelos, y así empezamos a tocar. Ya para mayo, más o menos, comenzamos la cosecha de la papa”, subrayó.

    La reflexión colectiva llevó a resignificar el espacio como yapu urbano. “Hay muchos pasos que deben seguirse en este ciclo agrícola para la siembra y crianza de la papa. Una vez concluido todo ese proceso, nos preguntamos: ¿todo lo que hemos hecho es un huerto urbano en la ciudad? Con algunos amigos comentamos que no, que no se trata de una chacra urbana. En Aymara, ‘chacra’ se dice yapu. Entonces dijimos: en las comunidades rurales se les llama yapus a las chacras donde se siembra papa. Es decir: chacra en aymara significa el espacio de tierra destinado al cultivo de papa en el área rural”, detalló.

    Precisó que, en el caso de la ciudad, serían yapus urbanos: chacras o espacios de tierra donde se siembra papa en contexto urbano. “Y ahí está la diferencia: mientras los huertos urbanos pueden incorporar técnicas sustentables desde la ecología, los yapus urbanos se cultivan exclusivamente con saberes y prácticas ancestrales. Esa es la diferencia. Por eso los hemos denominado yapus urbanos. Realizar esta operación permite recuperar lo que ya existe en el barrio”.

    El boliviano aseguró que, desde esta visión, “tenemos un modo de recuperar las prácticas de diálogo y conversación con la madre tierra, desde los pueblos indígenas en la ciudad”.

    Señaló que la falta de respeto hacia la naturaleza no humana nos ha llevado a la crisis ambiental global que hoy afecta a la vida toda.

    Crianza y disputa en la ciudad

    Juan Carlos Nina Bautista, promotor de líderes juveniles con un enfoque comunitario en barrios populares de la ciudad de La Paz, explicó que el proceso de recuperación de prácticas ancestrales en espacios urbanos se articula mediante el método del uywaña.

    Uywaña significa ‘crianza’ o ‘criador’. La crianza tiene la característica de amparar, cuidar, aportar, ayuda, constituir al otro, contagiarle la amistad, el amor, el estar bien, el sonreír, el llorar. Todo lo que puede hacer una persona cuando está junto a otra, pero también es recíproca; quiere decir que aprende del otro, se deja constituir por sus características”, indicó.

    Enfatizó que este método ancestral, practicado por los abuelos para cuidar la tierra, los ríos y las montañas, contrasta con el método moderno de la ciudad, que convierte la naturaleza no humana en objeto de dominio: cemento, ladrillos, gradas, asfalto.

    “Se combinan dos métodos: no se trata solo de disputar la ciudad, sino también de criar. Nuestros pueblos han aprendido a convivir con ambos: el método de la lucha y el método de la crianza, incluso en el acto de constituirse mutuamente con el opresor. Quiere decir que en momentos donde la ciudad excluye, viola tus derechos, intenta que olvides tus prácticas culturales. Nuestras ciudades luchan”, reflexionó.

    Expansión de los ‘yapus’ urbanos

    Juan Carlos Nina Bautista, especialista en Ciencias Jurídicas, dijo que la experiencia iniciada con doña Sonia se multiplicó.

    “Con doña Sonia arreglamos el cerco, y desde el proyecto decidimos construir algunos más; habíamos planteado hacer unos treinta cercos para treinta jardineras. Justo vino la pandemia, y como la gente tuvo un poco más de tiempo, empezaron a mirar y a preguntar por qué le colocábamos cerco a la vecina. Les decíamos: porque la señora siembra papa, y lo hace con saberes ancestrales. Entonces alguien decía: ‘Yo también puedo hacerlo, yo vengo de tal provincia, de la provincia Camacho, o de otras’. Y ahí tuvimos que adecuar el método, diversificar las formas de siembra y cosecha”, contó.

    Declaró que las formas de siembra y cosecha de cada territorio son particulares. “La siembra no se realiza en una fecha única, sino en ciclos y cada una con sus propias prácticas, con sus propios rituales y con sus lógicas. En cuatro vacíos de la ladera oeste del macrodistrito Cotahuma, desarrollamos 200 yapus, donde pudimos cosechar 150 arrobas de papa, entre todos los pobladores”, ilustró.

    Además, Nina Bautista informó que se implementaron yapus escolares en dos colegios, como estrategia pedagógica para que los jóvenes dialoguen entre los conocimientos ancestrales. “En diálogo de saberes con los conocimientos occidentales, más urbanos, para sus carreras profesionales. Para que no dejen de sembrar papa: ese tubérculo que nos ha acompañado durante ocho mil años, que tiene su propia antigüedad y que cuenta con más de cuatro mil variedades en los Andes”, resaltó.

    Juventud, música y pedagogía comunitaria

    Juan Carlos Nina Bautista explicó que, si bien la mayoría de participantes en los 200 yapus urbanos eran familias adultas —parejas de 40, 50 y 60 años—, la incorporación de jóvenes fue clave para dinamizar el proceso; de hecho, Sonia es una mujer menor de 35 años

    “Con los jóvenes con quienes luego conformamos un grupo juvenil, comenzamos a recuperar la música, los tejidos y a dinamizar —a ‘juvenilizar’— todo lo que implica la biodiversidad, a acompañar los procesos de crianza de quienes sabían sembrar y cosechar. Se dio entonces una transmisión intergeneracional de saberes y prácticas, pero con los jóvenes el método es otro: debe ser más juvenil, más alegre, más musical”, platicó.

    Contó que jóvenes de entre 15 y 25 años participaron en la creación de música: “Música para la siembra, música para la cosecha, música para la fiesta de Todos los Santos. Con ella, se empezaron a recuperar muchas otras cosas, muchas otras diversidades que habitaban en el barrio. Y con los jóvenes, simplemente fue natural: se acercaban por el deseo de aprender música, por conocer estas prácticas culturales”.

    Adicionalmente, Nina Bautista señaló que los yapus escolares en dos colegios permitieron integrar el método del uywaña —la crianza— al plan curricular, en diálogo con la Ley de la Educación Avelino Siñani-Elizardo Pérez. Los profesores, que son también pobladores y padres de familia, aprendieron que no se trataba de enseñar a sembrar, sino de permitir que los estudiantes se convirtieran en profesores de prácticas ancestrales. “Decidimos ir al revés y aprender de ellos”, afirmó.

    “Hemos construido nuestro método y aprendimos las diversas lógicas, que puede ir de abajo hacia arriba, y el cambio también puede venir de arriba hacia abajo con el tema de la descolonización, y llegar también hasta la crianza. Compartir desde abajo y llegar a la descolonización haciendo categorías de nuestras prácticas culturales, como es el caso de los yapus urbanos y las ciudades conviviales sobre el vivir bien”, sintetizó.

    De la resistencia a la propuesta: categorías del vivir bien desde la crianza

    En conversa con la periodista venezolana Nerliny Carucí, el educador popular Juan Carlos sostuvo que los pueblos indígenas en Bolivia han trabajado históricamente con dos métodos: el de la lucha —resistencia, disputa, liberación— y el de la crianza —constitución mutua, contagio afectivo, aprendizaje recíproco.

    Explicó que la crianza no es solo cuidado, sino también diálogo espiritual y político. “Somos cristianos, pero también dialogamos con los cerros, con las montañas”, reafirmó.

    Nina advirtió sobre la romantización de la resistencia como forma de vida permanente. “Hay que saber dónde trabajar los métodos educativos, principalmente en lo urbano, sin olvidar que hay personas que se dedican con más fuerza también a la resistencia. Pero no se puede resistir todo el tiempo: la revolución pasa, y hay que saber vivirla. La liberación y la revolución no son modos de vida permanente, lineal. Por eso, tras la liberación, viene el tiempo de la crianza: constituirnos uno al otro, recuperar la biodiversidad. No basta con luchar; hay que proponer un proyecto de sociedad. En nuestro caso, ese proyecto es el vivir bien”, expuso.

    Instó a plantear otras categorías sobre justicia, derecho, educación, economía, economías plurales. “Ahí es donde un poco va la ofensiva, pero desde un modo creador, no desde un modo opresor”, añadió.

    Disputar los imaginarios

    Juan Carlos Nina Bautista manifestó que la lógica de dominación, heredera de la colonialidad, sigue operando en la forma en que se perciben las prácticas culturales originarias. “Ese enfoque de ver lo cultural como retraso siempre está ahí”, dijo.

    “Ahí entra el método de la disputa y la resistencia, pero también el momento de proponer, teorizar y proyectar las tecnologías andinas hacia el siglo XXI como formas de vida que respondan a los problemas actuales. Todo depende de cómo se transmitan esos saberes: si se reducen a prácticas únicamente antropológicas, sin propuestas de vida, un poco demagógicas, sino simplemente de forma, entonces, sí puede parecer como un atraso, y que no aporta a la vida del siglo XXI, con todas estas transformaciones tecnológicas, digitales, etcétera; y, más bien, tienes que sistematizar y teorizar las tecnologías culturales —en nuestro caso, tecnologías andinas—, pero tienen que ser muy bien trabajadas”, planteó.

    Dijo que el reto es evitar que lo ancestral sea reducido a una forma sin contenido, sin horizonte.

    Reproducir vida

    Para finalizar, el educador popular Juan Carlos Nina Bautista agradeció al programa “En clave comunal” y a la Comuna venezolana por el espacio de diálogo y reciprocidad.

    Expresó su deseo de que experiencias como la de los yapus urbanos puedan replicarse en otros territorios de los Sures globales, como parte de un horizonte compartido donde sea posible convivir con la madre tierra, cultivar esperanza y reproducir vida en lugar de guerras.

  • Comuna caraqueña Lanceros de la Victoria postula a sus estudiantes a la Unacom

    Comuna caraqueña Lanceros de la Victoria postula a sus estudiantes a la Unacom

    Caracas, 17 de octubre de 2025.- Previo al inicio de los procesos formativos de la Universidad Nacional de las Comunas (Unacom), planificados para este lunes 20 de octubre en todo el territorio, la Comuna Lanceros de la Victoria —situada en la parroquia Caricuao del Distrito Capital— realizó su asamblea de postulación de estudiantes a esta casa de estudios.

    Durante su intervención en la asamblea de postulación, el rector de la Universidad Nacional de las Comunas (Unacom), Jorge Arreaza, destacó que este proceso rompe con los esquemas tradicionales de ingreso universitario.

    “Ustedes en su Comuna ya los aceptaron, no tuvieron que llenar un sistema, ni poner las notas de bachillerato, ni las opciones, ni una prueba interna. La Comuna misma es la autoridad y que solo ella determina las áreas de formación y quiénes serán los estudiantes”, subrayó.

    El Rector llamó a los formadores y las formadoras a asumir el acompañamiento de los estudiantes, articulando espacios productivos y saberes comunitarios. “Ustedes mismos van a ser en parte sus facilitadores, sus profesores”, afirmó.

    Además, anunció que expertos provenientes de universidades, ministerios e incluso del ámbito internacional se incorporarán al proceso de formación para garantizar a los estudiantes y a las estudiantes “el acceso al mejor conocimiento”.

    Jorge Arreaza rechazó categóricamente la lógica individualista de la formación profesional y reafirmó que “para el que estudie en la Universidad Nacional de las Comunas cualquier carrera es para sembrar y cosechar ese conocimiento en su Comuna”.

    Erick Romero, postulado por la Comuna Lanceros de la Victoria al Programa Nacional de Formación en Economía Comunal, expresó su compromiso con la transformación territorial desde la organización popular. Asimismo, asumió públicamente su responsabilidad como futuro estudiante de la Unacom: “Me comprometo con mi Constitución, me comprometo delante de Dios que seré uno de los guerreros de esta universidad y voy a luchar por mis hijos, por mis abuelos, por los que vienen en camino”.

    Romero reivindicó la necesidad de romper con el paradigma individualista sembrado por el capitalismo, así como el apremio de recuperar el sentido comunitario. “Creo en el socialismo territorial, creo en la Universidad Nacional de las Comunas. ¡En revolución todo es posible!”, expresó.

    Franklin Canónico, postulado por la Comuna Lanceros de la Victoria al Programa Nacional de Formación de Ingeniería Informática, manifestó también su responsabilidad con el territorio que habita. “Estoy aquí como postulado por mi comunidad y eso me compromete a estudiar y a trabajar por ella. Quiero ser parte de esta transformación que hoy se manifiesta con la Unacom”, dijo.

    Conociendo un poco de la Comuna Lanceros de la Victoria

    Esta Comuna caraqueña está integrada por 12 Consejos Comunales y conformada por más de mil trescientas familias, que agrupan a más de veintitrés mil pobladores: once mil hombres y doce mil mujeres.

    En este link puede cargar Mapa de Conocimiento, Acta de Compromiso y postulados a la Unacom por Comuna: https://gobiernocomunal.planpatria.gob.ve

  • Investigador venezolano: La solución al problema ecológico es comunal

    Investigador venezolano: La solución al problema ecológico es comunal

    Caracas, 10 de octubre de 2025.- “Nosotros formamos parte de la naturaleza. Cuando dejamos de reconocer a la naturaleza como sujeto, como madre, y la consideramos un ‘recurso’ o como ‘algo’ que está para servirnos, la reducimos a una función meramente operativa”. Así lo dijo Pedro Borges, ecólogo venezolano, en el marco de su reflexión sobre la crisis ambiental global.

    Para el investigador caraqueño, el problema central radica en la desacralización de la naturaleza no humana, entendida no como una noción religiosa, sino como el desconocimiento de su valor en sí misma. “Cuando uno dice que algo es sagrado, está reconociendo que tiene una importancia en sí misma ―no porque sea útil o funcional, sino porque tiene un valor propio―”, explicó.

    Esto ha generado una visión instrumental de lo que nos rodea, donde la naturaleza no humana se trata como un objeto reemplazable, “como una nevera que sirve mientras enfría, y que se cambia cuando deja de hacerlo”, ilustró.

    Borges expresó que, si viéramos a la naturaleza no humana “como un sistema del cual formamos parte, y que debe estar saludable no solo porque nos afecta, sino porque tiene valor en sí misma, la trataríamos de forma muy diferente”, afirmó.

    “Tenemos un sistema capitalista que se basa en el lucro, donde todo funciona en términos económicos. Es el capitalismo —o su peor expresión, el neoliberalismo— el que le pone precio a todo y deja de valorar las cosas por su esencia intrínseca”, aclaró.

    Visión instrumental de la naturaleza

    Durante su participación en el programa “En clave comunal”, Pedro Borges, biólogo venezolano, sostuvo que la raíz de la visión de objeto de la naturaleza está en el hecho de que no la reconocemos como madre tierra. “Por eso, la expresión madre tierra es tan hermosa, porque apunta a la sacralización, al respeto profundo de la Tierra como una madre, como una de las cosas más importantes que tenemos, de las que además formamos parte”, reafirmó, en la antesala del Congreso Mundial en Defensa de la Madre Tierra.

    Para el especialista, esta ruptura se inscribe en un proceso histórico más amplio: la modernidad. “La modernidad se basó en separar, en fragmentar todo, entre otras cosas, al ser humano y a la naturaleza”, explicó.

    Detalló que esta fragmentación dio paso a una lógica individualista, donde cada cosa es valorada en función de su utilidad para el sujeto. “Cuando los demás dejan de importar —cuando solo importo yo, o exclusivamente quienes me rodean—, comienzo a percibir todo lo demás como un instrumento para mi supuesta felicidad. Entonces, vamos fragmentando todas las cosas y considerando cada cosa en función de lo que me sirve a mí. Si no me sirve a mí, no tiene sentido. Por eso, esa visión del servicio ecosistémico”, sintetizó.

    Desafíos ecológicos

    Sobre el territorio, Pedro Borges, investigador del Centro de Estudios de la Crisis Ambiental Global del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), señaló que, desde la lógica capitalista, este también es reducido a un recurso funcional.

    “Estoy aquí porque me conviene, pero si no, me voy a otro lado”. Lamentó esta visión arraigada en parte de la juventud, que desconoce el valor afectivo e histórico del lugar de origen. “El lugar donde tú naces es importante”, subrayó.

    Indicó que, desde el horizonte comunal, el territorio no solo provee sustento, sino que permite articular vínculos con quienes comparten la misma matriz de vida. Esta dimensión es clave para enfrentar los desafíos ecológicos, que —según Borges— no tienen solución desde lo individual. “Esa es otra trampa del neoliberalismo y del capitalismo. El problema se resuelve en comunidad (y con la comunidad), o no se resuelve”, aseveró.

    No toda herramienta tecnológica es válida

    El investigador Pedro Borges reconoció que la tecnología tiene un rol en la comunicación y en la vida cotidiana, pero advierte sobre el riesgo de convertirla en una falsa solución, especialmente si parte de la lógica moderna/colonial. “Yo no estoy en contra de la tecnología. Lo que estoy en contra es pensar que la tecnología va a ser así como el gran dios que va a permitir que hagamos siempre lo mismo, pero sin dañar el ambiente”, argumentó.

    Frente a la crisis ambiental global, el ecólogo cuestionó las respuestas que se limitan a sustituir dispositivos sin transformar las lógicas de vida. “Eso es una gran trampa. Por ejemplo, el uso de los automóviles. Sabemos que los combustibles fósiles son fuente de gases de efecto invernadero que calientan la atmósfera. ¿La solución son los carros eléctricos? No, la solución es reorganizarnos de forma tal que, utilizando lo que podemos utilizar sin dañar el ambiente, podamos satisfacer nuestras necesidades de transporte. Pero eso implica una transformación de la forma en cómo hacemos las cosas”, sostuvo.

    Advirtió que no toda herramienta tecnológica es válida ni todo producto tiene sentido, especialmente cuando se originan desde una civilización de muerte como la modernidad. “¿Para qué estamos usando las herramientas que tenemos?”, se preguntó, al cuestionar el uso de transgénicos como una solución a la crisis alimentaria.

    “Ese tipo de modificaciones conlleva numerosos problemas. Al alterar genéticamente una especie, se genera prácticamente una nueva, que se introduce en un ecosistema donde nunca antes ha existido. No se sabe con certeza qué consecuencias puede tener. De hecho, una de las principales causas de pérdida de biodiversidad es la introducción de especies exóticas. Sin embargo, se intenta convencer a la población de que el verdadero problema es la necesidad de producir alimentos para una población en constante crecimiento”, resaltó.

    No obstante, el biólogo desmontó ese argumento con datos contundentes: “El mundo ya produce mucho más alimento del que necesita. Un tercio de toda la comida que se produce en el mundo se bota. Se bota porque, de repente, por ejemplo, una cadena de hamburguesas cocinó cuatro piezas de carne y llegó solo un cliente, y las otras cuatro piezas las botó. O porque botas un cambur, porque tiene tres manchitas negras y no te gustó. Y te digo que, en el mundo, más o menos un quinto, un sexto de la población pasa hambre. Si usted hace un pequeño ejercicio matemático, un tercio es mucho más grande que un quinto”.

    En tal sentido, el científico aseguró que “tenemos un problema que no vamos a resolver con tecnología. Lo que tenemos es que distribuir mejor el alimento”.

    Reconectar con la vida

    Pedro Borges, ecólogo venezolano, sostuvo que uno de los pasos fundamentales para enfrentar la crisis ambiental global es reconectarse con el territorio, pero no con el cemento que pisamos, sino con el ecosistema del que formamos parte. “El sistema ecológico es como una red, incluso podría decir como una familia, para expresarlo más románticamente”, afirmó.

    El caraqueño dijo que la causa principal de la crisis ambiental global es la sobrecarga que el sistema moderno impone al sistema ecológico, contaminando aguas, suelos y alterando los ciclos naturales.

    Para ilustrar el daño ambiental, Borges recurrió a una metáfora: “Contaminar las aguas es como orinar el plato de sopa que tú vas a beber después”.

    Entre los elementos más afectados, menciona los ciclos del nitrógeno y el fósforo, nutrientes esenciales para las plantas y para los seres humanos. “Si esos ciclos se distorsionan, la vida no se hace posible”, alertó.

    “La vida es como un gran proceso que fluye de unos elementos a otros y que nos permite a todos estar vivos”, expresó, al describir la interdependencia entre plantas, insectos, nutrientes y energía solar. Reiteró que la ruptura de estos vínculos —por contaminación, sobreexplotación o monocultivo— amenaza la continuidad de la vida en el planeta.

    Subrayó que, aunque todos los seres humanos contribuyen de algún modo con la crisis ambiental, las responsabilidades son diferenciadas. Un ejemplo clave es la agricultura. Mientras la agricultura indígena establece una “relación amorosa con la naturaleza”, basada en diversidad, recuperación del bosque y respeto por la madre tierra, la agricultura industrial impone una “relación de violación”: monocultivos extensivos, uso intensivo de fertilizantes y plaguicidas, y destrucción del suelo. “Al final terminamos con un pedazo de suelo muerto que no permite la vida ni la producción de alimentos”, advirtió.

    Frente a esta lógica de muerte, el investigador propuso aprender de la agroecología y de los principios indígenas. “Podemos tomar ciertos elementos, pero aquí necesitamos construir una propuesta que sea verdaderamente nuestra, arraigada en el territorio y sustentada en esos principios”, declaró.

    Para Pedro Borges, todo diseño territorial —desde el uso del agua hasta la generación de energía— debe partir de preguntas fundamentales: ¿de dónde viene?, ¿hacia dónde va?, ¿qué ocurre durante su uso?, ¿de dónde va a venir esa energía? ¿Cómo se está produciendo esa energía?

    El conuco como saber ecosistémico

    Pedro Borges, investigador del Centro de Estudios de la Crisis Ambiental Global, acentúo que recuperar los valores éticos de la cosmovisión indígena exige primero conocerla desde otras perspectivas, libres de prejuicios. Un ejemplo es el conuco.

    Explicó que el conuco indígena opera en ciclos largos y articulados. Se abre uno nuevo cada año, pero siempre hay conucos de distintas edades, lo que permite una rotación planificada de semillas y especies.

    El científico resaltó que uno de los aspectos más complejos en el conuco es el manejo del fuego. Borges relató que las quemas no son desorganizadas, sino parte de un proceso que permite reincorporar nutrientes al suelo mediante las cenizas.

    Para Borges, el conuco es prueba de una cultura con saberes milenarios que han sostenido la vida sin destruir la madre tierra. “No tienen artículos publicados en revistas científicas en inglés, pero hay un conocimiento profundo que está más que demostrado, porque tiene miles de años de existencia. En cambio, la civilización moderna, con todos sus conocimientos, tiene cientos de años y ya está acabando con el planeta”, recalcó.

    Ecología de saberes

    El investigador venezolano Pedro Borges indicó que uno de los desafíos centrales en el abordaje de la crisis ecológica es la imposición de la ciencia moderna como único sistema válido de conocimiento.

    Aunque admitió su utilidad para responder ciertas preguntas, declaró que no todos los problemas se resuelven desde la misma perspectiva. “Hay diferentes preguntas que se responden de diferentes maneras, y hay diferentes formas de enfocar los diferentes problemas”, apuntó.

    Aseveró que la visión dominante tiende a “validar” otros saberes solo si se ajustan a sus propios criterios, lo que perpetúa una jerarquía epistémica. “Si contamos con varios sistemas de saber, ¿por qué privilegiar uno por encima del otro? Lo que se busca es un verdadero diálogo de saberes —o, como prefiero llamarlo, una ecología de saberes—, semejante a un ecosistema donde todo se vincula y se transforma”, comentó.

    El ecólogo afirmó que un diálogo honesto entre saberes es imposible si las estructuras que conforman el saber científico son racistas. “Si son racistas es imposible, por supuesto”, dijo.

    Manifestó que el diálogo entre un científico occidental y un sabio yanomami, por ejemplo, no es sencillo, porque implica formas distintas de pensar, sentir y conocer.

    “Lo importante es que exista voluntad y respeto. Solo entonces podemos emprender un camino que, aunque no es fácil, resulta fructífero: puede ayudarnos a resolver los problemas reales que enfrentamos. Porque la ciencia moderna —a pesar de sus avances y logros— ha contribuido a la destrucción del planeta en apenas unos pocos siglos. Obviamente, hay mucho que aprender de otras formas de conocimiento, pero ese aprendizaje solo puede comenzar desde el respeto”, reflexionó Pedro Borges.

    Imaginarios del progreso y la soberanía alimentaria

    El científico caraqueño Pedro Borges denunció que uno de los obstáculos para recuperar los sistemas alimentarios autóctonos es el imaginario dominante del progreso, asociado a los modelos de consumo globalizados.

    “Es uno de esos imaginarios engañosos, yo diría que venenosos, porque el ‘progreso’ está en lo que vemos por televisión. Yo veo la última serie gringa y quiero lo que ahí se muestra, o sea, ahí está el progreso. Entonces, ‘sí, yo puedo comer arepa de yuca, pero eso es porque estoy en una crisis. Cuando yo pueda volver a comprar mi hamburguesa, me como mi hamburguesa’. Y esa es la forma en que nos tienen atrapados. Y fíjate que hay mucha falsedad en eso”, deliberó.

    Frente a esa visión, el ecólogo reivindicó los tubérculos como el ñame y la yuca, cultivados históricamente en Venezuela, y denunció su desprecio sistemático por parte del sistema capitalista.

    Criticó que el sistema agroindustrial privilegia la homogeneidad y la rentabilidad: una papa de tamaño estándar, cultivada masivamente con pesticidas, procesada en máquinas y convertida en papas fritas con exceso de sal.

    “Un conuco no es muy rentable desde el punto de vista de ganar dinero, pero nos puede mantener perfectamente felices y bien alimentados, y enfatizo lo de felices porque, además, el conuco indígena no es solo una forma de producción de alimentos, es un espacio de vida”, reafirmó.

    La Comuna como respuesta ecosistémica

    Pedro Borges sostuvo que la principal relevancia de la Comuna frente a la crisis ambiental global radica en su capacidad de generar comunidad vida. “Estoy en un territorio con un grupo de personas con el que comparto la vida. Hay necesidades y todos queremos que las necesidades colectivas sean satisfechas, no solo las mías”, apuntó.

    Concluyó que “la respuesta al problema ambiental comienza por generar comunidad: una comunidad en la que exista conexión con el territorio y preocupación por los otros seres humanos que allí habitan. Entonces, ¿qué es lo principal? Planificar en comunidad y orientarnos hacia la sustentabilidad, o sea, hacia formas de vida que no distorsionen, perturben ni destruyan los sistemas que permiten la vida”.

  • Comunas de Falcón postulan estudiantes a los Programas Nacionales de Formación de la Unacom

    Comunas de Falcón postulan estudiantes a los Programas Nacionales de Formación de la Unacom

    Falcón, 10 de octubre de 2025. En el marco del despliegue territorial de la Universidad Nacional de las Comunas (Unacom), este viernes se realizaron en el estado Falcón las asambleas de postulación de estudiantes a los Programas Nacionales de Formación (PNF) que ofrece esta casa de estudios. Las actividades tuvieron lugar en dos territorios comunales: la Comuna Socialista Simón Bolívar, ubicada en el municipio Urumaco, y el Circuito Comunal Carabobo 200, en el municipio Miranda.

    En la actividad realizada en la Comuna Socialista Simón Bolívar se contó con la participación de los postulados y postuladas a los PNF, así como de voceros comunales, formadores, formadoras, comuneros, comuneras, el rector de la Unacom, Jorge Arreaza, y demás representantes de esta casa de formación.

    “Yo siempre les repito a nuestros comuneros y comuneras: tuve la oportunidad de conocer parte del mundo, fui Canciller durante cuatro años, y esto que ustedes están haciendo aquí no ocurre ni parecido en ninguna parte del mundo. Esto solo ocurre aquí en Venezuela”, expresó Jorge Arreaza, rector de la Unacom, durante su intervención en la asamblea de postulación en Urumaco.

    Arreaza reivindicó el legado de Hugo Chávez como clave del modelo educativo territorial. “Con la Misión Sucre, el comandante Chávez llevó la universidad al municipio. Ahora, con la Universidad Nacional de las Comunas, el pueblo y el presidente Maduro están llevando la universidad a la casa, a la comunidad, a la Comuna. Ustedes aquí han hecho un proceso extraordinario, desde su Agenda Concreta de Acción”, dijo.

    El Rector insistió en que la planificación nacional solo adquiere sentido si parte de las necesidades reales del pueblo. “No tendría ningún sentido tener un plan de la patria nacional si no tenemos un plan en la comunidad. Es la única manera de saber los verdaderos problemas del pueblo: preguntándole al pueblo”, señaló.

    Finalmente, Arreaza enfatizó que el poder político y los recursos materiales deben estar acompañados por el conocimiento. “Puede haber un Presidente, un Gobernador, una Alcaldesa, pero si no hay Consejo Comunal, si no hay Comuna, no hay poder en el territorio. Si no tienen conocimiento, si no tienen las herramientas que les permitan resolver sus problemas, estaríamos mal utilizando el poder. Por eso el presidente Maduro me dio esta responsabilidad: ser Rector de la Unacom y que garantizara que esta universidad esté en todas las Comunas de Venezuela, formando ingenieros, ingenieras”, declaró.

    El profesor Emil Roque, de la Comuna Socialista Simón Bolívar, explicó que se han realizado asambleas con nueve consejos comunales, y que el trabajo continúa para garantizar que la información llegue a todos los sectores. “Todavía vamos a continuar porque estoy seguro de que hay personas a las que no les ha llegado la información, pero voy a ir hasta allá para que esa información llegue”, afirmó.

    Expuso que uno de los temas centrales identificados en el Mapa de Conocimiento ha sido el acceso al agua, considerado como una lucha histórica de la comunidad. “Tenemos nuestro propio sistema hídrico, necesitamos fortalecerlo”, señaló. A partir de este diagnóstico, comentó que surgió la propuesta de investigación sobre redes de agua subterránea en el territorio, lo cual fundamenta la postulación al Programa Nacional de Formación en Ingeniería en Aguas, una de las ofertas propias de la Unacom.

    El profesor destacó que las necesidades en infraestructura, educación y deporte han sido recogidas como ejes formativos. “Tenemos personas que pueden desarrollar estas temáticas dentro de la comunidad, ingenieros civiles que nos van a ayudar a fortalecer esta área de conocimiento”, indicó. En este sentido, propuso en el territorio recuperar saberes ancestrales como la construcción con adobe, integrándolos en procesos educativos. “Aquí tenemos casas que han durado 100 años…, ¿por qué no volver a aplicar ese método en nuestras instituciones?”, reflexionó.

    Misser Gómez, postulada en la asamblea de la Comuna Socialista Simón Bolívar, expresó el significado que tiene para ella y su comunidad la llegada de la Unacom al territorio. “Tenemos muchas expectativas positivas, sabiendo que esta universidad que está llegando, esta bendición que está llegando a las comunidades es para traer el conocimiento, el conocimiento que abre esperanza, el conocimiento que abre frontera, el conocimiento que abre la vida en las comunidades”, afirmó.

    Pedro Gutiérrez, joven de 17 años, egresado del liceo en la Comuna Ramón Marcelino Rivero González y actualmente estudiante de ingeniería civil en Urumaco, expresó su compromiso con la educación territorial al postularse al Programa Nacional de Formación en Ingeniería en Electricidad. “Confío en la Universidad Nacional de las Comunas porque tengo la visión de que es una vía a la territorialización de la educación universitaria”, expuso.

    Circuito Comunal Carabobo 200

    Durante la asamblea de postulación en el Circuito Comuna Carabobo 200, el rector de la Universidad Nacional de las Comunas (Unacom), Jorge Arreaza, envió una salutación por el avance organizativo de ese territorio. “Saludos, queridas comuneras, queridos comuneros de la Comuna Carabobo 200. Ya son Comunas, ya van en ese camino irreversible”, expresó.

    Arreaza destacó que la oferta académica de la Unacom responde directamente a las necesidades identificadas en la Agenda Concreta de Acción de cada Comuna.

    “Ustedes están haciendo las cosas de manera coherente; están construyendo, a partir de su planificación comunal, su mapa de conocimientos, identificando —desde los nudos críticos de su Agenda Concreta de Acción— las necesidades de formación que tienen. Y, bueno, están derivando los programas de formación, de los 19 que tiene nuestra Universidad Nacional de las Comunas, y ustedes van a elegir las áreas que necesitan. Ahí se van a postular esos compatriotas, de cualquier edad, para que puedan desarrollar sus estudios, su investigación y, sobre todo, ser útiles a su comuna”, expresó Arreaza, en un mensaje a los pobladores y las pobladoras del Circuito Comunal Carabobo 200.

    El Rector informó que el proceso formativo contempla la elaboración de autobiografías y portafolios, para conocer los saberes previos de cada postulante. “Probablemente un compañero o una compañera que sea ya experto en alguna área, aunque no tenga título, se le acredita en sus saberes y puede sacar su carrera en mucho menor tiempo”, indicó.

    Arreaza reafirmó que la universidad está abierta a todas las edades: “Recuerden que cualquier edad es bienvenida en la Unacom, en el proceso introductorio”.

    Definió a la Unacom como una comunidad de conocimiento donde todos aprenden de todos. “Son bienvenidos no solo el formador, la formadora y los estudiantes, sino los profesores que se quieren incorporar, los sabedores, los maestros-pueblos, las maestras-pueblos”, afirmó.

    Para concluir, Arreaza celebró que los estudiantes del Circuito Comunal Carabobo 200 se integren formalmente a la universidad: “Van a pasar a ser ya formalmente parte de la universidad, pero estudiando en una carrera que es escogida por su Comuna, y es la Comuna la única autoridad en la universidad que les está dando a ustedes la oportunidad de estudiar”.

    En este link puede cargar Mapa de Conocimiento, Acta de Compromiso y postulados a la Unacom por Comuna: https://gobiernocomunal.planpatria.gob.ve

  • Radiotón por Palestina | Karina Ochoa: “Violencia contra Palestina y asedio contra Venezuela son expresiones de una misma lógica colonial”

    Radiotón por Palestina | Karina Ochoa: “Violencia contra Palestina y asedio contra Venezuela son expresiones de una misma lógica colonial”

    Caracas, 1 de octubre de 2025.- “Lo ocurrido con el genocidio en Palestina, encabezado por el régimen sionista de Israel, y el asedio contra Venezuela por parte de Estados Unidos constituyen dos ejemplos de las dinámicas coloniales e imperiales que buscan reposicionar un modelo que ya no pretende enarbolar las banderas de la democracia ni de los derechos humanos. Dichas banderas son, en realidad, mascaradas discursivas sobre las cuales se sostiene la falacia del proyecto moderno, sustentado en la famosa promesa de la emancipación humana”.

    Así lo dijo la socióloga mexicana Karina Ochoa, en conversa con la periodista venezolana Nerliny Carucí, en el programa radial “En clave comunal”, transmitido por la emisora Radio Nacional de Venezuela (RNV).

    La maestra descolonial explicó que el asedio contra Venezuela por parte de los Estados Unidos y la violencia extrema ejercida por Israel sobre Palestina son expresiones de una misma lógica colonial.

    “Creo que Venezuela también se convertirá en un referente, porque así como sostenemos que la defensa de Palestina es la defensa de la humanidad —y esto no es una metáfora—, hoy tampoco podemos negar que defender a Venezuela es defender a toda la región de la Abya Yala frente a la perpetuación de ese orden neocolonial e imperial, encabezado por el gobierno de Donald Trump”.

    Venezuela como blanco de una guerra narrativa

    La socióloga descolonial Karina Ochoa sostiene que el ataque imperial contra Venezuela debe entenderse como parte de una reconfiguración del orden neocolonial que se actualiza sin máscaras. “Hoy se derrumban los cánones del proyecto neoliberal, pero eso no significa que se esté derrumbando el sistema neocolonial que se ha sostenido por más de 500 años”, advirtió.

    “Se están desestructurando, se están fisurando, se están rompiendo las narrativas que sostenían la promesa de emancipación humana”, agregó Ochoa. Manifestó que, en su lugar, emergen políticas abiertamente neocoloniales, articuladas por gobiernos como el de Donald Trump, que construyen discursos falaces para justificar el asedio a Venezuela.

    Según ella, esta ofensiva responde al intento de Estados Unidos por mantener su hegemonía sobre América Latina, única región que aún le sirve de resguardo frente “al gran fracaso” de su proyecto imperial.

    La pensadora mexicana subrayó que la descomposición interna de los Estados Unidos, marcada por una guerra civil y el colapso de su estructura legal, se refleja también en el apoyo que ha brindado al genocidio en Palestina.

    “Estados Unidos atraviesa, evidentemente, una guerra civil latente. Trump y las élites del poder económico y político han contribuido a descomponer —o digamos desestructurar— el entramado legal que sostenía al Estado, tanto en el ámbito nacional como en el internacional. Esta desestructuración se ha visto reforzada por el respaldo que Estados Unidos, Gran Bretaña y otros gobiernos han brindado, por ejemplo, al genocidio en Palestina. Lo que estamos presenciando es, precisamente, la desestructuración —incluso de la plataforma legal— que durante mucho tiempo sostuvo a los Estados nacionales liberales, y, en particular, a los Estados Unidos. Es evidente: ya no puede silenciarse ni encubrirse que el ataque de Estados Unidos contra Venezuela responde al intento de preservar su hegemonía global, y procurar ejercer control sobre nuestra América como mecanismo de reposicionamiento imperial”, alegó.

    Para Ochoa, esta desestructuración revela el principio imperial de anulación de la alteridad, que hoy —reiteró— se manifiesta con un ataque narrativo insostenible contra Venezuela. “La defensa de Venezuela va a ser la defensa de la región latinoamericana, de la región del Caribe y la defensa que tendremos que hacer todos y todas en Abya Yala”, insistió.

    Redes sociales digitales entre un doble juego

    Karina Ochoa advirtió que las redes sociales digitales ocupan un lugar estratégico en las reconfiguraciones contemporáneas del capitalismo imperial. “Estas redes sociales forman parte de las dinámicas del enriquecimiento global y están en manos de los dueños del poder y del dinero”, señaló.

    La maestra descolonial hizo énfasis en la necesidad de reflexionar respecto a qué derivas nos pueden plantear las plataformas virtuales y el desarrollo tecnológico de la inteligencia artificial, pues está generando también percepciones de mundo entre los usuarios y las usuarias de estas redes.

    No obstante, la socióloga mexicana dijo que las redes sociales digitales no solo reproducen narrativas falaces —como las fake news que desconectan a los pueblos de sus realidades territoriales—, sino que también permiten porosidades que revelan lo que los gobiernos y poderes hegemónicos intentan silenciar.

    “Por eso yo no hablo solamente de la anulación y el borramiento, sino de la desconexión. Las redes [sociales digitales] han generado dinámicas que desconectan a las personas de las realidades concretas. Sin embargo, también han abierto múltiples porosidades y han sido utilizadas para visibilizar aquello que los gobiernos y los grandes poderes han intentado ocultar: desde protestas masivas hasta manifestaciones particulares contra el genocidio en Palestina. Hoy, las redes sociales [digitales] hacen circular lo que se ha querido acallar y que, pese a los intentos, no ha podido ser silenciado. Entonces, yo creo que las redes sociales [digitales] tienen ese doble juego”, indicó.

    La pensadora mexicana subrayó que el debate pendiente es el papel que jugarán la inteligencia artificial y las nuevas tecnologías en la reconfiguración global, en un escenario “donde Europa —herida desde hace mucho tiempo y moribunda— y Estados Unidos —en una debacle— no están dispuestos a perder”.

    La Comuna como Estado

    La socióloga mexicana Karina Ochoa identificó en la guerra cognitiva uno de los desafíos que enfrenta la Comuna venezolana. “Es algo que la Comuna venezolana está viviendo desde hace mucho tiempo”, afirmó.

    Para Ochoa, este cerco no ha logrado desquebrajar la apuesta política, ética, social y cultural que encarna el Estado bolivariano, gracias a la fuerza interna del proyecto comunal.

    Sostuvo que Venezuela ha sido laboratorio de bloqueos múltiples, no solo económicos, sino también informativos. “Sabemos que, durante mucho tiempo, se construyó —a través de las fake news— un montaje destinado a desvirtuar profundamente lo que realmente ocurría en Venezuela. Sin embargo, esa batalla tampoco ha sido ganada [por el imperio]. Hoy noto, veo, experimento un apoyo creciente; percibo que, fuera de Venezuela, muchos de los velos han caído. No toda la gente, pero sí una parte significativa —sobre todo la gente que está movilizada— comienza a percibir, de manera clara y nítida, que estos intentos por distorsionar las realidades concretas que se viven en Venezuela se están desmoronando”, puntualizó.

    La mexicana apuntó que la Comuna venezolana aparece en este contexto como una alternativa replicable en América Latina. “Es decir: la apuesta de la Comuna tiene que salir de las fronteras venezolanas, traspasar ese intento de barrera que se ha pretendido construir en las últimas décadas. Creo que Venezuela nos tiene que mostrar lo que ha logrado y cómo lo que ha logrado está permitiendo esas resistencias frente a esta embestida de los imperios neocoloniales como el de los Estados Unidos. Estoy convencida de que en Venezuela se va a mantener la apuesta porque está construida desde abajo y porque se construyó como una apuesta que está encarnada en la comuna”, expresó.

    La Comuna como forma de vida

    Para la pensadora descolonial Karina Ochoa, la alternativa comunal venezolana no solo representa una instancia política, sino una forma de relación humana. “La comuna nos vuelve a recordar que la reproducción de la vida está asociada al territorio, está asociada a las personas que nos relacionamos en esos territorios”, afirmó.

    La socióloga subrayó que la comuna se fortalece al resistir los borramientos y desconexiones que impone el orden dominante. “La comuna hará uso —como lo hacemos todos— de las nuevas tecnologías, del celular, de las plataformas virtuales. Pero no lo hará para reproducir las lógicas de la dominación, sino que apelará a estos recursos tecnológicos para potenciar la relacionalidad humana”, precisó.

    Ochoa ubica la apuesta comunal como una de las cuatro “patas” de los proyectos ético-políticos construidos en las últimas décadas en América Latina. De acuerdo con la investigadora mexicana, la primera es el debate descolonial, que permite cartografiar la dominación y descomponer esas lógicas del poder que se han construido desde hace 500 años. La segunda es el buen vivir, surgido desde el mundo andino y las raíces ancestrales. La tercera es el Estado plurinacional, hoy puesto en jaque, que revela la necesidad de construir desde abajo. Y la cuarta es el Estado comunal.

    “Esta última quizá ha sido la dimensión menos mostrada, la menos evidenciada —y lo entiendo—, porque el proyecto del Estado comunal no se prefiguró como si contáramos con un manifiesto del Estado ideal al que había que arribar. El proyecto del Estado comunal se fue andando, se fue caminando, se fue construyendo. Y, por supuesto, el comandante Chávez, como estratega y como gran pedagogo, supo recorrer ese camino, comprendiendo progresivamente hacia dónde debía dirigirse. Ese proceso también se dio en momentos críticos, precisamente cuando el proyecto fue puesto en cuestión: intentos de golpe de Estado, desestabilización, confrontación. En esos contexto, el comandante Chávez entendió que, lejos de ceder, había que profundizar el proyecto”, declaró Ochoa.

    Karina Ochoa llamó a reconstruir esa genealogía, a evidenciar el trayecto que llevó a la Comuna como Estado, y a incorporarla como vértice de transformación en Abya Yala.

    Feminizar la comuna

    Para la socióloga mexicana Karina Ochoa, la Comuna no es solo una forma de organización estatal, sino “el ámbito de la posibilidad de la existencia”. En ese sentido, mencionó que las economías comunales deben ser espacios de defensa de la plena existencia frente a los mecanismos de anulación y borramiento, entre ellos la violencia ejercida sobre cuerpos feminizados, infantiles, ancianos y jóvenes.

    Ochoa remarcó que las mujeres han sido históricamente parte de los ciclos de cuidado y reproducción de la vida, no solo en el hogar, sino en el barrio, el territorio y los espacios públicos. “Las mujeres nos metemos con facilidad para resolver problemas cotidianos en nuestros edificios, en nuestras calles. Por eso, cuando hablamos de feminización, lo que deberíamos plantear —fundamentalmente— son estrategias que las mujeres hemos desplegado históricamente para sostener y entretejer redes de reproducción y cuidado de la vida. Redes que, aunque han sido protagonizadas por mujeres, no les son exclusivas. Por eso no se trata solo de hablar de mujeres, sino de feminizar las lógicas comunitarias para garantizar la reproducción de la vida”, señaló.

    Precisó que “feminizar” no significa exclusividad femenina. “Hay hombres que también feminizan su existencia y se comprometen activamente con las redes de cuidado y de reproducción de la vida. Lo hacen de múltiples maneras: a través de la acción política, del compromiso territorial en el barrio y en la comuna, de la representación pública, pero también en el ámbito familiar, en el cuidado cotidiano, en la crianza”, expuso.

    Karina Ochoa afirmó que feminizar la comuna no es solamente incorporar a las mujeres, “es entender que hay una lógica de reproducir la vida, de generar redes de cuidado de todos y de todas, que generalmente asociamos —por ejemplo— con las abuelas, las mamás, las tías, y que es un referente también para hacer de las comunas espacios de cuidado y de reproducción comunitaria”, manifestó.

    Ontología relacional y defensa de la madre tierra

    La investigadora mexicana Karina Ochoa afirmó que la lógica de reproducción de la vida que encarna la comuna incluye necesariamente la defensa de los cuerpos feminizados, entre ellos la madre tierra.

    “Es la defensa de los ríos, de la posibilidad de acceso al agua. Pero ese acceso no puede reducirse a una lógica de desarrollo que entuba los cauces; implica, más bien, comprender que los ríos no solo alimentan a las personas, sino también a los árboles, a los animales, que conforman una ontología relacional de la que debemos hacernos conscientes”, dijo.

    La socióloga mexicana propone que el proyecto comunal sea punta de lanza de una apuesta a otra, “de una apuesta que reconoce las redes de reproducción de la vida y del cuidado, donde no es nada más el cuidado de las personas, sino también el cuidado de la Tierra, del barrio, es el cuidado de todo lo que posibilita entendernos en relacionalidad para reproducir la vida. Y creo que las comunas pueden ser ese punto de partida, como lo han sido las comunidades indígenas, cuando proyectan desde el buen vivir una apuesta ética que se traduce en una propuesta política: la construcción de Estados plurinacionales, que hoy deben ser profundizados, porque los ataques también los están fisurando”, planteó.

    En tal sentido, Ochoa alentó a recuperar la enseñanza de Chávez que implica reconocer que el Estado comunal ofrece pistas para pensarnos desde otro lugar. “Pero ese proyecto también tiene que ser profundizado, en el sentido de entender que no solo es la defensa de la Comuna, sino que es la defensa de la madre tierra, de la ontología de una relacionalidad donde yo no estoy separada del entorno, no estoy separada del territorio, no estoy separada de la Pachamama, no estoy separada de las formas como nos relacionamos en nuestras propias comunidades rurales, urbanas o rururbanas”, argumentó.

    ¡No están solos/solas!

    Para cerrar su intervención en el programa “En clave comunal”, la maestra descolonial Karina Ochoa reiteró que la defensa de Venezuela representa la defensa de toda la región de Abya Yala, de toda la región latinoamericana y del Caribe.

    “Entonces quiero transmitirles desde fuera de Venezuela que ustedes son un referente y que no están solos, no están solas, y que el imperio no va a poder contra pueblos que tenemos 500 años de experiencia, de resistencia”, finalizó.

  • Radiotón por Palestina | Jorge Arreaza: La defensa de Palestina es la defensa de la humanidad

    Radiotón por Palestina | Jorge Arreaza: La defensa de Palestina es la defensa de la humanidad

    Caracas, 30 de septiembre de 2025.- Este martes, el programa “Entre comunes” 101.1 FM, moderado por Jorge Arreaza y Victoria Londoño, se sumó a la transmisión del Radiotón de la Plataforma Internacional de Solidaridad con la Causa Palestina, una jornada comunicacional transmitida por Radio Nacional de Venezuela (RNV) y enlazada con emisoras comunitarias y alternativas de todo el país.

    Durante la emisión especial, Jorge Arreaza, rector de la Universidad Nacional de las Comunas (Unacom), reafirmó su defensa del pueblo palestino, a propósito de los dos años que se cumplen este próximo 7 de octubre desde el inicio de la nueva ofensiva genocida de Israel.

    El Rector de la Unacom se refirió al número de palestinas y palestinos asesinados por el régimen sionista. “Se manejan estimaciones que podrían acercarse a una cifra real de 200.000 personas fallecidas. Las autoridades de Gaza —que aún persisten— reportan cerca de 61.000 víctimas”, dijo.

    Arreaza denunció el asedio permanente, la hambruna, los bombardeos y el uso de francotiradores contra el pueblo palestino, especialmente contra niñas, niños y bebés. “Es inaceptable que nosotros en este mundo, en el siglo XXI, estemos viviendo una suerte de holocausto invertido en tiempo real al ver a millones de seres humanos sometidos al asedio permanente”, recriminó.

    El Rector venezolano describió a Israel como “una entidad creada como enclave colonial occidental, capitalista e imperialista”, y cuestionó el liderazgo de una élite sionista que “impone la voluntad del capital en tierras sagradas para cristianos, judíos y musulmanes”.

    Agradeció a Radio Nacional de Venezuela (RNV) como señal matriz del radiotón, así como a las radios comunitarias y comerciales que se han sumado a la jornada desde distintos puntos del país.

    “Tenemos una deuda acumulada con Palestina —porque además la defensa de Palestina es la defensa de la humanidad—. El mismo enemigo del pueblo palestino es el enemigo del pueblo venezolano. Por eso debemos ser los primeros en alzar la voz y ofrecer nuestros pechos por la paz y la existencia del pueblo palestino”, expresó.

    Agradeció también a los movimientos y plataformas que han organizado esta jornada de solidaridad con el pueblo palestino. “Gente con inmensa sensibilidad por la humanidad misma, por la vida. Y por supuesto, un agradecimiento a todas las instituciones de la Revolución Bolivariana —que es también un gobierno del pueblo, con el presidente Nicolás Maduro al frente— por haberla organizado, con autoridad moral en la defensa de los derechos del pueblo palestino. ¡Mantengámonos en las calles permanentemente, hasta que Palestina sea libre!”, enfatizó Arreaza.

  • Jorge Arreaza: “La organización comunal hace al territorio inexpugnable y es símbolo de soberanía”

    Jorge Arreaza: “La organización comunal hace al territorio inexpugnable y es símbolo de soberanía”

    Miranda, 26 de septiembre de 2025.- En el ámbito de una jornada de formación política con jóvenes de la Escuela Internacional de Liderazgo de la Juventud Antonio José de Sucre, ubicada en Filas de Mariche, estado Miranda, el rector de la Universidad Nacional de las Comunas, Jorge Arreaza, compartió reflexiones sobre el papel estratégico de la organización territorial en la defensa de la soberanía nacional.

    Durante su intervención, Arreaza enfatizó que la consolidación de los Consejos Comunales, las Comunas y las instancias de defensa popular constituye un escudo frente a las pretensiones de dominación imperial.

    El Rector subrayó, además, que el control comunal sobre los espacios, recursos y formas de vida es clave para impedir cualquier quebrantamiento externo. “La organización comunal hace al territorio inexpugnable y es símbolo de soberanía”, declaró.

    “Fíjense ustedes en la importancia que esto tiene, no solo para el Gobierno, la felicidad, la planificación y la satisfacción de necesidades, sino también para la defensa de la Patria. Por eso, cuidemos el Consejo Comunal, cuidemos la Comuna; hagamos que los Circuitos Comunales se conviertan en Comunas, y que esas Comunas, articuladas en ejes, configuren nuevas formas de ciudad —llámense como se llamen— donde podamos seguir fortaleciendo el poder del pueblo en el territorio”, acentuó.

    Dirigiéndose a los jóvenes presentes, Arreaza visualizó una imagen simbólica del año 2030, en el bicentenario de la muerte de nuestro Libertador Simón Bolívar. “Ustedes, desde sus Consejos Comunales, desde su Comuna, desde su Sala de Autogobierno, desde su empresa de producción social, podrán decirle: Libertador, somos independientes, tenemos democracia, somos libres, somos felices, y construimos esta historia de gobierno que nos genera la mayor suma de felicidad posible”, expresó.

    La Escuela Internacional de Liderazgo, como espacio formativo, tiene el objetivo de preparar a jóvenes con vocación revolucionaria, pensamiento crítico y capacidad de gobierno desde el territorio. En ella se imparten contenidos político-ideológicos orientados a fortalecer valores socialistas y humanos, y a formar cuadros para asumir responsabilidades en la construcción del futuro de Venezuela.

  • Humanidad y saberes populares | Unacom desafía el modelo educativo dominante

    Humanidad y saberes populares | Unacom desafía el modelo educativo dominante

    Carabobo, 25 de septiembre de 2025.- En el ámbito de la 1era Avanzada de Formadoras y Formadores Comunales, realizada este jueves en el auditorio Aristóbulo Istúriz de la Universidad Nacional de las Comunas (Unacom), el profesor Guy Vernáez expuso sobre el lugar que ocupa la matemática en la cultura educativa y en la vida cotidiana.

    Planteó que muchas familias, aun habiendo transitado procesos educativos, se sienten incapaces de acompañar a sus hijos en tareas básicas, especialmente en el área matemática. “Eso yo no lo sé”, es una frase que —según Vernáez— se repite comúnmente.

    El profesor contrastó esta situación con la mirada social hacia la lectura. Mientras el analfabetismo suele ser motivo de descalificación, el desconocimiento matemático es aceptado. Esta paradoja muestra una estructura que normaliza la dificultad matemática como parte del modelo dominante.

    Ante este panorama, Vernáez sugirió romper el paradigma que presenta a la matemática como una barrera. Su invitación a las formadoras y los formadores comunales fue clara: construir ejercicios colectivos donde participen quienes saben, quienes no saben, quienes disfrutan y quienes rechazan la matemática. “La intención es que se trate de hacer este ejercicio con sus estudiantes”, expresó.

    Filosofía de la Unacom

    Por su parte, el profesor Andrés Eloy Ruiz compartió reflexiones sobre la filosofía transformadora que orienta esta casa de estudios.

    Ruiz destacó que la Unacom se fundamenta en una pedagogía del reconocimiento mutuo, donde cada gesto sensible entre personas constituye una acción formativa. “Cada vez que hemos actuado con sensibilidad y respeto hacia la otra persona, hemos tenido oportunidad de vivir un modelo educativo que valida lo que el otro sabe”.

    En su intervención, el profesor subrayó que la Unacom no reproduce el modelo universitario tradicional, sino que lo cuestiona desde adentro. “Ahora luchamos contra nuestro propio concepto de institución para que la cosa cambie”, afirmó.

    Enfatizó que la Unacom reconoce los conocimientos populares y saberes ancestrales como base legítima del conocimiento. “Las abuelas sabían cómo curar el catarro, los campesinos cómo hacer fertilizantes, y hubo quien supo fabricar desodorantes cuando no había acceso comercial. Aquí hay un todo”, señaló.

    Frente a la noción dominante de “calidad”, el profesor propuso centrar el modelo educativo en la “humanidad”. “Si nos centramos en la mujer y en el hombre —no en lo individual, sino en lo colectivo— estamos seguros de que vamos a acertar”, expresó, en referencia a los desafíos que enfrenta el sistema educativo venezolano.

    Andrés Eloy Ruiz recordó que la Unacom nace de una experiencia previa —la Universidad Bolivariana de las Comunas— y que su transformación de nombre implica un mandato de rectoría sobre el proceso de cambio universitario en Venezuela. “Si no hubiésemos abierto la puerta de la educación al pueblo, la revolución hubiese sido derrotada”, aseguró.

  • 400 profesores conforman 1era Avanzada de Formación de Formadores comunales de la Unacom

    400 profesores conforman 1era Avanzada de Formación de Formadores comunales de la Unacom

    Carabobo, 25 de septiembre de 2025.- Este jueves comenzó en la Universidad Nacional de las Comunas (Unacom) la 1era Avanzada de Formación de Formadoras y Formadores Comunales.

    La vicerrectora de Formación e Investigación de la institución, Eulalia Tabares, indicó que cada participante de este encuentro va a cumplir la tarea de acompañar y formar en el conocimiento a cada Comuna o Consejo Comunal. «El maestro y la maestra tienen la profesión más hermosa», destacó.

    Tabares enfatizó que la Unacom, en esta primera avanzada, cuenta con 400 formadores y formadoras comunales, «compañeros y compañeras que están acá porqué tienen el reconocimiento en sus comunidades, en su Comuna, que es la instancia para el fortalecimiento de la Revolución», expresó Tabares.

    Por su parte, la secretaria general de la Unacom, Magaly Newton, aseveró que la Unacom y sus formadores es un desafío y está en el Mapa de los Sueños del presidente Nicolás Maduro. Además, agregó que los formadores están llamados a la construcción de un país nuevo.

    La vicerrectora para la Democracia y Sociedad Comunal, Kelly Pacheco, llamó a los pioneros de la formación comunal a educar para la vida y la Comuna. «Esta es una universidad para que reconozcamos al otro. Mi recomendación es mantener la humildad y prepararse para los nuevos retos que vamos a encontrar en los territorios», dijo.

    Igualmente, el director territorial Unacom, Ciro Rodríguez, subrayó que la 1era Avanzada de Formación de Formadoras y Formadores Comunales nacieron del Poder Popular y tienen la responsabilidad de encaminar la comunalización de la Unacom.

    «Somos los más aliados para que el pueblo tenga el poder (…) Este es uno de los retos más grande de esta universidad», aseveró Rodríguez.

    Finalmente, el director del campus universitario de la Unacom, Nerio Vargas, detalló que esta universidad está naciendo en un contexto politico de amenaza militar desde Estados Unidos, «por eso es importante romper cualquier tipo de paradigma que encontremos en el territorio».

    Insistió en que hay que seguir fortaleciendo la creación de los Mapas de los Sueños, Conocimiento, así como sumar las tecnologías de información en el proceso de comunalización de la Unacom.

  • Comunas llaneras se convierten en «ambientes universitarios» con otros horizontes educativos

    Comunas llaneras se convierten en «ambientes universitarios» con otros horizontes educativos

    Caracas, 23 de septiembre de 2025.- “En las comunidades hay muchos conocimientos y saberes que pueden significar alternativas de supervivencia”. Así lo dijo Édgar Cárdenas, director del Servicio Comunitario de la Universidad Nacional Experimental de los Llanos Occidentales Ezequiel Zamora (Unellez).

    Durante su participación en el programa radial “En clave comunal”, Édgar Cárdenas relató que, desde hace tres años, la Unellez ha venido consolidando una práctica pedagógica que vincula la formación académica con el acompañamiento directo a las comunidades.

    Destacó que este proceso responde a la Ley de Servicio Comunitario del Estudiante Universitario promulgada en 2005, durante el gobierno del entonces presidente Hugo Chávez, con el propósito de poner la ciencia al servicio del pueblo.

    Subrayó que los estudiantes que han cumplido el 50 % de sus unidades académicas participan en esta experiencia, dando cumplimiento al artículo 4 de esta ley. Su acción se inscribe en el ámbito social del punto y círculo universitario, en consonancia con las políticas de acción comunitaria impulsadas por el Gobierno nacional, en el marco de las 7 Grandes Transformaciones del Plan Patria.

    Cárdenas manifestó que la práctica del servicio comunitario de la Unellez se fundamenta en una metodología cualitativa que privilegia la hermenéutica, la fenomenología, la historia de vida y la etnografía. “No llegamos diciendo: Yo soy el que más sé, y te voy a decir cómo hacer las cosas. En la comunidad, hay mucho conocimiento. Nuestro trabajo se centra en entreayudarnos”, explicó Cárdenas.

    El profesor comentó que la Unellez ha desplegado un abordaje sociocomunitario en cuatro estados llaneros: Portuguesa, Apure, Barinas, Cojedes. “Estamos en toda esta geografía de los cuatro estados llaneros”, afirmó Cárdenas.

    Aprendizajes

    Para Yerali Rojas, estudiante de Contaduría Pública en Barinas y participante en la Comuna Libertador, interactuar con la comunidad ha significado mucho más que una práctica académica: se ha convertido en una experiencia de encuentro humano y aprendizaje compartido. “Son personas bastante abiertas al momento de compartir”, expresó.

    Rojas valoró especialmente el impulso que recibió para trascender el aprendizaje formal y adentrarse en el saber territorial. “Te dicen que no te detengas, que si vas a estudiar más lo hagas, que no te quedes solamente con el aprendizaje del libro”, relató.

    Agradeció de manera especial a la jefa del Consejo Comunal Santa Rita I, por abrirles las puertas y permitirles conocer las vivencias cotidianas, los aspectos económicos y socioculturales del territorio. “Nos enseñaron cómo viven ellos del día a día”, contó.

    Formación con pertinencia territorial

    El director del Servicio Comunitario de la Unellez, Édgar Cárdenas, aseguró que el vínculo entre universidad y comunidad no solo es parte de un programa pedagógico, sino un acto de reciprocidad.

    Desde una perspectiva regional y local, Cárdenas destacó que el objetivo es formar profesionales con sentido de pertinencia territorial.

    Cárdenas informó que, en el período académico 2025-I, el Vicerrectorado de Planificación y Desarrollo Social de la Unellez compartió con 159 comunas de los estados Barinas, Apure, Portuguesa y Cojedes; espacios donde hay presencia universitaria: núcleos, aldeas o residencias estudiantiles.

    Este enfoque busca que los egresados permanezcan en sus comunidades. “Que esos estudiantes que son oriundos del barrio Santa Rita que egresan de Contaduría Pública no se vayan del estado, sino que se queden trabajando dentro de su propia comunidad; es decir: en Santa Rita”, argumentó.

    En tal sentido, la permanencia de los estudiantes en sus comunidades de origen representa, para Édgar Cárdenas, una garantía de avance colectivo. “Los muchachos se están educando y se están formando con sentido de pertinencia en lo suyo, en la comunidad donde nacieron”, afirmó.

    El profesor subrayó que, para el servicio comunitario, los estudiantes se inscriben, reciben formación y, luego, se incorporan a las comunidades. “No los mandamos sin antes explicarles la metodología”, explicó.

    Detalló que el proceso incluye la elaboración de un diagnóstico de la situación conjuntamente con los habitantes de la comunidad. Aseveró que este trabajo queda sistematizado en una base de datos institucional.

    Diálogo de saberes

    La práctica del servicio comunitario en la Unellez se fundamenta en un compromiso con el diálogo de saberes. Así lo reafirmó Édgar Cárdenas al explicar que la universidad no hace imposiciones. “Nosotros no llegamos a una comunidad diciéndoles cuál es su problema y cómo tiene que solucionarlo. Nosotros no somos los dueños exclusivos del conocimiento”, señaló.

    Subrayó que cada estudiante recibe la orientación de relacionarse con la comunidad desde la escucha activa y el respeto. “Tenemos que escuchar a la comunidad, que es la que nos dice cuáles son sus problemas; no es que ella no sabe resolverlos: ella tiene sus conocimientos para resolverlos”, aclaró.

    Para Cárdenas, el rol de la universidad es reorganizar, orientar y proponer elementos científicos que contribuyan a mejorar la realidad territorial, sin desplazar los saberes locales.

    Contabilidad comunal

    Yerali Rojas, estudiante de Contaduría Pública en la Unellez, explicó que el ejercicio contable en las comunidades se diferencia del enfoque capitalista por su orientación directa a las necesidades colectivas.

    Ilustró como ejemplo la gestión en el Consejo Comunal Santa Rita I, donde el servicio comunitario se ha vinculado a proyectos de agua y a iniciativas para emprendedores. “El ejercicio contable es mucho más centrado en la necesidad que tiene la comunidad de suplir todos los proyectos”, señaló.

    La estudiante dijo que esta gestión implica planificación, solicitud de recursos al Estado y adecuación de espacios para el desarrollo de actividades productivas.

    Producción comunal frente al modelo capitalista

    El profesor Édgar Cárdenas afirmó que la Universidad Nacional Experimental de los Llanos Occidentales Ezequiel Zamora (Unellez) ha venido dirigiendo su enfoque productivo en conjunto con las comunidades, en respuesta tanto a la crisis ambiental global como al horizonte comunal que orienta las políticas públicas del país.

    Según explicó Édgar Cárdenas, esta evolución se ha materializado en un sistema diversificado de incentivos e intercambios entre productores y universidad, que permite un verdadero compartir de saberes.

    “Estamos involucrados desde un punto de vista de desarrollo local. Hemos logrado combatir esa mirada de producción capitalista hacia lo que es el vivir en comunidad”, señaló.

    Desde el conocimiento

    En su intervención en el programa “En clave comunal”, Erick Álvarez, estudiante de Pesca Continental en el estado Apure, compartió su experiencia en la Comuna Centauro del Llano, donde ha venido articulando los conocimientos universitarios con las prácticas productivas del territorio. “La experiencia vivida aquí en esta comunidad ha sido muy provechosa”, afirmó.

    En el ámbito de las Siete Transformaciones, Álvarez y sus compañeros han impulsado actividades vinculadas a la pesca y la agricultura. “Quisimos dar un paso más allá, aportando nuestro granito de arena desde el conocimiento. Nos propusimos incentivar a los pescadores a transformar la economía local. Para ello, impulsamos la piscicultura y la siembra de especies autóctonas, con el propósito de darle un respiro a nuestros ríos, lagos e incluso mares. Esta iniciativa contribuye a fortalecer, una vez más, el equilibrio de nuestro ecosistema”, comentó.

    El estudiante describió que la comunidad Brisas del Río, ubicada dentro de la Comuna Centauro del Llano, está conformada por 280 familias y 480 habitantes. Además de ser pescadores, muchos de sus integrantes se dedican a la comercialización de productos en San Fernando, especialmente en el sector conocido como Las Cabañitas, punto de encuentro de agricultores y pescadores. “A ellos los abordamos en charlas y talleres sobre medidas sanitarias para mantener la inocuidad de los productos”, relató Álvarez.

    Producción consciente

    Para Édgar Cárdenas, el horizonte comunal implica una ruptura con el modelo capitalista. “Una vida armónica en comunidad, equilibrada, en paz, sin explotación”, reafirmó.

    Desde la universidad, explicó, se ha asumido el compromiso de hacerle frente a esa situación, promoviendo otras formas de producir. “El hecho de que usted tenga una empresa y esté resolviendo económicamente ciertos aspectos vinculados al desarrollo humano no le otorga derecho alguno a pasar por encima —ni a atropellar— a las personas con las cuales usted y su entorno se desarrollan. Esta interacción humana, en el marco del desarrollo empresarial, nos permite confrontar directamente la lógica del capitalismo”, explicó.

    Cárdenas también subrayó el reconocimiento de la madre tierra como sujeto de vida, lo que implica producir con conciencia, respeto y espiritualidad. En el caso de Apure, recriminó la depredación ambiental causada por la presión económica sobre los cuerpos de agua, y se refirió a la piscicultura como alternativa científica y ecológica. “Están los muchachos de la Unellez allí, trabajando con lo de la piscicultura, que es una pesca consciente. No tenemos que traer especies de otro lado para poder subsistir”, argumentó.

    A este comentario, el estudiante Erick Álvarez añadió que es necesario reconsiderar seriamente la piscicultura como una alternativa sostenible para el acceso a proteína alimentaria. “La situación actual de los ríos llaneros exige un proceso urgente de recuperación, lo cual implica reducir la dependencia de la pesca directa y avanzar hacia la incorporación de especies criadas en sistemas piscícolas dentro de la dieta regional —y, por qué no, también en la dieta nacional—”, enfatizó.

    “Intercambio parejo”

    De acuerdo con el director del Servicio Comunitario de la Unellez, Édgar Cárdenas, el último período académico, esta casa de formación logró abordar 200 comunidades y establecer vínculos con 140 comunas en los estados Portuguesa, Apure, Cojedes y Barinas.

    “En este último período se ha alcanzado un nivel de afectación profundamente significativo. ¿Por qué? Porque la comunidad ya comprendió el sentido de la propuesta. Los muchachos no van a la comunidad a imponer. Ni ellos, ni los profesores, ni los tutores. Vienen a convivir, a aprender, y a aprender mutuamente. Aquí aprende el docente, aprende el estudiante y aprende la comunidad”, expresó.

    Con un tono coloquial, Cárdenas catalogó esta dinámica como un “intercambio parejo”, donde la universidad y la comuna se reconocen mutuamente como sujetos de conocimiento y transformación.

    Descolonización progresiva

    En el cierre del programa “En clave comunal”, los tres invitados coincidieron en la necesidad de profundizar el proceso de descolonización educativa desde la práctica territorial.

    Édgar Cárdenas llamó a todos los estudiantes del país a formarse con sentido de pertinencia y a atender las verdaderas necesidades del pueblo. “Desde la Universidad Nacional Experimental de los Llanos Ezequiel Zamora, convocamos a los estudiantes de esta patria a vincularse con sus comunidades”, expresó.

    Yerali Rojas invitó a las comunidades a mantener abiertas sus puertas a los proyectos de servicio comunitario, y a los universitarios a seguir prestando apoyo desde el territorio. “Ayudarlos a ellos a crecer en comunidad”, señaló.

    Por su parte, Erick Álvarez centró su mensaje en la concientización ecológica. “Estamos en el deber de cuidar y preservar a la madre tierra, es nuestro hogar”, afirmó.